Clasificación TouchArcade: Una de mis cosas favoritas es cuando un juego logra combinar dos géneros muy diferentes en un todo unificado. Estoy pensando en juegos como la serie Blaster Master, que combinan plataformas de desplazamiento lateral basadas en vehículos con interesantes niveles para caminar de arriba hacia abajo. O, como mi reciente Dave the Diver favorito, combina el buceo roguelike con la gestión de restaurantes. Ocean Keeper de RetroStyle Games es uno de esos juegos que logra combinar dos conjuntos diferentes de mecánicas, y su bucle de juego y sus rutas de actualización te mantienen con ganas de jugar una y otra vez.
La jugabilidad básica de "Ocean Keeper" es que conduces tu genial mecha gigante y chocas en un extraño planeta submarino. Debes colarte en la cueva submarina para recolectar recursos, pero no puedes quedarte allí por mucho tiempo, porque se acerca una ola de enemigos y debes conducir tu robot para resistirlos. La parte de minería se juega en vista lateral e implica excavar rocas para descubrir diversos recursos o artefactos especiales. Por alguna razón, la minería también te permite ganar monedas de oro. Como se mencionó anteriormente, solo tienes poco tiempo para minar antes de encontrarte con un enemigo. Una vez que estés de vuelta en tu mech, el juego se convierte en un juego de disparos de doble palanca de arriba hacia abajo con elementos ligeros de defensa de torres mientras te defiendes de múltiples ataques de todo tipo de locas criaturas submarinas.
Todos tus recursos se utilizan para mejorar tu máquina minera y tu mech, y ambos tienen enormes árboles de habilidades ramificados para que los explores. Este es un roguelike, por lo que si mueres durante la sección de encuentro con el enemigo, tu juego termina y pierdes cualquier mejora o habilidad que hayas desbloqueado durante esa partida en particular. Sin embargo, también puedes desbloquear actualizaciones y personalizaciones continuas entre juegos, por lo que incluso si tienes una o dos malas experiencias, sentirás que siempre estás mejorando. También puedes esperar que el mapa mundial y el diseño de las cuevas sean diferentes cada vez que juegues.
Probablemente ahora sea el momento de mencionar que Ocean Keeper es un poco lento al principio y seguramente experimentarás una jugabilidad realmente mala al principio. Sigue así y descubrirás que las mejoras empiezan a llegar, tus habilidades empiezan a mejorar, empiezas a comprender mejor el flujo del juego y pronto te convertirás en un robot giratorio de destrucción submarina. La sinergia entre armas y mejoras es el corazón del juego, y probar diferentes combinaciones o diferentes tácticas es una diversión infinita durante el juego. Cuando comencé a jugar a Ocean Keeper no estaba seguro porque el juego empezaba muy lento, pero una vez que empezaba a ponerse emocionante era difícil querer jugar a otra cosa.